La Transición Energética es asunto de todos

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David Montaudon, Gerente de Comunicación de Hannover Fairs México. SPM

En la actualidad, no existe un país desarrollado que no esté enfrentando los grandes desafíos que conlleva la Transición Energética Renovable, desde infraestructura y capacitación, hasta aspectos económicos, financieros y sociales.

Los países que se encuentran liderando este camino han hallado en la visión de sus gobiernos y la unión de sus fuerzas políticas, así como en industrias, organizaciones sociales, la academia y la sociedad en general, la mejor forma de transitar este gran cambio.

Gracias a esta unión, países de todos los continentes como Alemania, China, Estados Unidos, Corea del Sur, Australia y Chile, están logrado la construcción de políticas públicas que los ubican como punteros de la industria del futuro eléctrico.

A la par, estas naciones han generado mecanismos para involucrar a todos los actores en la nueva era del prosumidor eléctrico. Un tiempo apasionante donde industrias, empresas, hogares e individuos pueden generar su propia energía eléctrica, contribuir a la diversificación de la matriz energética de sus países y por consecuencia ayudar a mitigar los efectos del Cambio Climático de forma simultánea.

Berlín, Alemania. Foto: Jorge Zarco

Foto: Jorge Zarco

Los ejemplos abundan. En Alemania, la política conocida como “Energiewende” guía su Transición Energética Renovable. Es una política que lleva más de 10 años activa y es considerada un proyecto transgeneracional. Su matriz energética se ha diversificado con la adopción intensiva de la energía fotovoltaica y eólica, logrando que en 2020 más del 50 por ciento del total de su generación provenga de fuentes renovables.

Actualmente, el país teutón ha incorporado el “Programa de Acción por el Clima 2030” a su estrategia de transición. Este plan incluye un sistema de fijación de precios de carbono por fases, exenciones de impuestos, incentivos para edificios energéticamente eficientes, mayores subsidios para vehículos eléctricos y una mayor inversión en transporte público.

Es imperante mencionar que los productores de energía comunitaria, compuestos de pequeños negocios, agricultores y hogares, son actores clave en la “Energiewende”.

Gracias a la formación de más de mil cooperativas en todo el país, hasta el día de hoy, han logrado que el 42 por ciento de todas las plantas de energía renovable alemanas sean gestionadas por dichas comunidades.

Dallas, Texas. Foto: Wikimedia/David Sucsy

Wikimedia/David Sucsy

La historia se repite en nuestro país vecino de los Estados Unidos, el cual, a partir de la llegada de Joe Biden ha fijado metas claras para convertirse en uno de los grandes líderes de esta transición.

Con un programa de tres billones de dólares entre gasto público y exenciones fiscales, el plan apunta hacia la transición de las Energías Renovables, el desarrollo de los vehículos eléctricos y la expansión del transporte público eléctrico.

Nuevamente el rol de los privados y las comunidades es de vital importancia. Según estimaciones de la Asociación de Industrias de Energía Solar de Estados Unidos (SEIA), en los próximos cinco años, el mercado solar comunitario agregará más de 4.3 gigavatios de capacidad total a la red eléctrica nacional.

La empresa china Panda Green Energy, conocida anteriormente como United Photovoltaics. Imagen: UNDP

Imagen de archivo de UNDP

Un caso curioso es el de China, a pesar de ser el mayor productor y consumidor mundial de carbón, al mismo tiempo es el mayor productor de componentes para Energías Renovables y de tecnologías asociadas como baterías y vehículos eléctricos, contribuyendo así con la descarbonización del planeta. El país asiático trabaja en consolidar su liderazgo en la cadena de valor mundial de las tecnologías renovables y evolucionar hacia la sostenibilidad de su sistema energético.

Para lograrlo, la potencia asiática ha optado por relajar las restricciones para que empresas como Tesla se instalen en el país sin necesitar joint ventures con compañías locales con el objetivo de retener el conocimiento y la especialización que lo mantendrán en el máximo tecnológico de las industrias del futuro.

Finalmente, en Corea del Sur y en Australia, avanzan rápidamente en la creación de proyectos de generación de energía renovable a gran escala en asociación con empresas nacionales e internacionales.

Lotte World Tower, Corea del Sur. Foto: Cmmellow Pixabay

A principios de este año, conocimos el anuncio del gobierno surcoreano sobre la construcción de la planta eólica en alta mar más grande del mundo con un valor de 43 mil millones de dólares. El acuerdo involucra a 33 entidades diferentes, incluyendo gobiernos regionales, la compañía eléctrica Kepco, y grandes empresas privadas como Doosan Heavy Industries & Construction y SK E&S.

También este año, conocimos los planes de Australia de construir la mayor planta de hidrógeno verde del mundo, con un costo de 100 mil millones de dólares y que utilizará energía eólica y solar para producir el que ya es considerado el combustible más limpio del mundo.

Sobre este tema, Chile es el país de la región que lleva la delantera, pues el año pasado presentó una “Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde”. Actualmente desarrolla dos plantas en su territorio en alianza con empresas nacionales e internacionales como Enel Green Power, Porsche y Siemens Energy.

Santiago de Chile. Foto: Shutterstock, PQ GRID

En México, lamentablemente, con la nueva iniciativa de Reforma Eléctrica vemos que el camino emprendido hacia la Transición Energética va en sentido contrario. El hecho de dejar en manos de solo un actor (la CFE) la responsabilidad de transitar hacia un modelo energético sustentable, sin reguladores independientes, que favorece la generación por combustóleo, y que condiciona las reglas de competencia, seguramente, resultará desfavorable para todos los mexicanos.

Nadie pone en tela de juicio la necesidad de contar con una empresa productiva del Estado fortalecida y un sistema eléctrico sin vicios legales. No obstante, esto no debe de dar pie a quitarle la oportunidad a industrias, empresas, comunidades y hogares a participar, en su justa medida, en la Transición Energética Renovable.

Al final del día, cuidar la salud de nuestro planeta es un asunto de todos.

Para hablar más de estos temas trascendentales para el futuro energético de México, te invitamos a que asistas a Solar Power México, la feria líder para la industria fotovoltaica de México y América Latina, del 9 al 11 de noviembre en el Centro Citibanamex.

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