La gestión energética y las acciones ante el cambio climático en México

Desde nuestras posiciones en distintos ámbitos de la sociedad, debemos tomar medidas urgentes a nivel global y local de cara a los mayores retos que enfrenta el mundo como el cambio climático, el crecimiento de la población en las grandes ciudades y el aumento de la contaminación (que ha contribuido a generar el primero), entre otros.

Hacer más eficiente la generación y uso de la electricidad, reduciendo la participación de energías fósiles, al mismo tiempo que se incrementa el de las renovables, son acciones necesarias para afrontar los desafíos mencionados. En México existe un gran potencial para ello, pues este país cuenta con una ubicación geográfica privilegiada, que le permite aprovechar las fuentes renovables como el sol y el viento (en principio), para generar energía.

Si bien el desarrollo de las energías renovables en el país se ha visto entorpecido por cuestiones de mercado y regulatorias que urge desatorar, su crecimiento no se ha detenido en los últimos años, debido a la capacidad de generación que ha alcanzado la infraestructura eólica y fotovoltaica ya instalada y a los proyectos nuevos en este rubro, aunado a una disminución de la producción de electricidad basada en carbón que, según documentos sobre el tema, ha sido de casi la mitad.

En el Nuevo Esquema del Sistema Eléctrico Nacional de 2021 (pág. 10) de la Secretaría de Energía podemos ver que de los 323,518 Gigawatts por hora que se producen, el 28.6 por ciento ya corresponde a energías limpias con casi el 12 por ciento generados por tecnologías eólica y solar.

Esto representa un gran avance, pero aún hay mucho por hacer.

De acuerdo con la base de datos de Energía Sostenible para Todos (SE4ALL) del Marco de Seguimiento Mundial de esta organización que lidera el Banco Mundial junto con la Agencia Internacional de Energía y el Programa de Asistencia para la Gestión del Sector de Energía, se estima que para 2028, la capacidad instalada para la generación de electricidad a partir de energías renovables se incremente en México en 19,761 MW de los cuales, se proyecta que las fuentes eólica e hidráulica tendrán la mayor participación, con 59 por ciento y 21 por ciento, respectivamente.

En la Fundación Konrad Adenauer (KAS, por sus siglas en alemán), organización comprometida con acciones y políticas que favorezcan una economía sustentable y la transición energética, decidimos trabajar en la realización de un análisis de iniciativas mexicanas en estas materias y presentamos la primera edición del Índice de Gestión Energética y Cambio Climático (IGECC) con el objetivo de promover e incentivar el desarrollo de políticas públicas en dichos rubros, así como de encaminar la gestión de gobiernos estatales y municipales hacia la implementación de acciones de mejora.

La primera entrega de este estudio comprende del segundo semestre del 2020 hasta el primer semestre del 2021 y evaluó cinco entidades federativas de México:

Así como dieciséis municipios pertenecientes a dichos estados con población mayor a 250 mil habitantes. Encontramos que los gobiernos de la región tienen importantes avances sobre la gestión del medio ambiente y los distintos aspectos que se relacionan e influyen directamente en el equilibrio de éste. No obstante, identificamos que aún existen iniciativas que se han propuesto, pero que todavía no han sido implementadas.

Observamos también que se han diseñado e implementado programas, políticas y proyectos en materia de sostenibilidad ambiental y territorial en los diversos instrumentos de política pública.

El IGECC reporta que el 100 por ciento de los gobiernos analizados, presenta propuestas alineadas a mejores prácticas en temas de ecología. Siendo las más recurrentes aquellas relacionadas a reducción de desechos y circularidad de los materiales, Consumo de energía con bajas emisiones de carbono, generación de energía con bajas emisiones de carbono y eficiencia en transporte.

Otros datos relevantes que permite identificar el IGECC son: Todas las dependencias consultadas cuentan con comités para la gestión de temas ambientales; para el caso de temas energéticos, únicamente el 33 por ciento los ha creado. Por otro lado, se observa un gran interés por impulsar las iniciativas de ahorro de energía existentes en los próximos meses, como lo indica el 67 por ciento de los gobiernos.

Particularmente, los estados de Jalisco, San Luis Potosí y Aguascalientes obtuvieron la mayor puntuación por sus acciones relacionadas con el uso de energías limpias y renovables, mientras que Guanajuato, San Luis Potosí y nuevamente Jalisco, son los que registraron más puntos en cuanto a iniciativas implementadas o por ejecutar, para incrementar la eficiencia energética.

Respecto al uso responsable del agua, Aguascalientes, Guanajuato y San Luis Potosí destacaron en dicha acción, en tanto que en el manejo de residuos industriales, lo hicieron Guanajuato, San Luis Potosí y Jalisco. En el mismo orden se colocaron dichas entidades en cuanto a puntuación en transporte e industria limpia y resaltó que Jalisco y Querétaro sean los que mejor calificaron en el cuidado de la vida marina y terrestre.

Contar con herramientas que nos ayuden a tomar las mejores decisiones para crear estrategias que empiecen a paliar el daño hecho a nuestro planeta y a emprender acción, es fundamental, por eso desde KAS aportamos este estudio con la misión de contribuir a mejorar el medio ambiente en México. Para conocer más sobre este Índice y sus resultados en las entidades analizadas, te invitamos a consultar el siguiente link: https://igecc-mex.org