Los centros de datos permiten el flujo de información del que depende el mundo digital. Sin embargo, esta característica también los convierte en uno de los mayores consumidores de energía eléctrica, una tendencia que solo irá en aumento, incrementando de forma simultánea la huella de carbono en todo el planeta.
Es evidente que la industria de los centros de datos se encuentra en una encrucijada. Por una parte, el sector de las TIC representado por dispositivos digitales, redes de telefonía móvil y servicios de internet dependen de ellos para poder existir. Por otra parte, en un escenario donde los centros de datos son responsables de cerca del 0.4 por ciento de las emisiones totales de carbono, contar con una estrategia de descarbonización sostenible se ha convertido en una misión crítica para el futuro de esta industria.
Varios actores de la industria ya han empezado a buscar formas eficientes y sustentables de generación de energía con proyectos eólicos o fotovoltaicos con algunos casos ya implementados en América Latina, que buscan disminuir la huella de carbono. Aunque actualmente estas soluciones no brindan el 100 por ciento de energía requerida por los centros de datos, si son un camino viable para reducir costos y hacerlos más eficientes.
¿Cómo se calcula la eficiencia energética de un centro de datos?
Los centros de datos operan las 24 horas del día, siete días a la semana, los 365 días del año sin interrupción. Las principales fuentes de consumo de energía en un centro de datos moderno son básicamente dos: los sistemas informáticos y la infraestructura de refrigeración. Esta última es utilizada para mantener las condiciones de temperatura adecuadas para el óptimo funcionamiento de todos equipos en la instalación.
Para calcular la eficiencia energética se utiliza el Índice de efectividad del uso de la energía, ampliamente conocido como PUE (o Power Usage Effectiveness). Éste hace referencia a la relación directa entre la energía total que ingresa a un centro de datos y la energía utilizada específicamente por los equipos de TI dentro de la instalación.
El PUE se calcula dividiendo el consumo de energía destinado al funcionamiento de la infraestructura TI con el consumo utilizado por los servicios de distribución de energía, generadores de respaldo y los sistemas de refrigeración y climatización, los cuales son vitales para mantener el rendimiento óptimo de toda la instalación.
Por lo que, cuanto más bajo sea el resultado de esta operación, mayor será la eficiencia de un centro de datos.
¿Cómo pueden ser más eficientes los centros de datos?
Para optimizar el uso de energía en los centros de datos hay diferentes estrategias, que van desde la virtualización hasta el cambio de soluciones de enfriamiento. Los profesionales de Forza nos dan algunos consejos para escoger UPS para su centro de datos que mejoren la eficiencia energética.
Generación de energía: La implementación de estrategias de generación de energías limpias en los centros de datos, principalmente soluciones fotovoltaicas es un camino que puede ir evaluando, gracias a su disminución de costos hasta un 85 por ciento. En la última década las soluciones fotovoltaicas hacen parte de las estrategias principalmente para soluciones modulares o prefabricadas.
Enfoque modular: Diseñar los centros de datos de forma modular facilitará maximizar el uso de potencia eléctrica, disminuir costos y poder escalar de forma rápida y flexible. Así mismo elija UPS con diseños modulares y que le permitan escalar fácilmente hacia sus necesidades futuras.
Priorizar la automatización: Al automatizar la gestión y administración de varias de las operaciones del centro disminuirá los fallos humanos. Por lo que elegir UPS que le permitan una fácil gestión y administración remota permitirá desplegar un plan de continuidad de negocio en caso de algún fallo de energía.
Tamaño igual a eficiencia: Al buscar eficiencia energética en el centro de datos se debe contemplar desde un inicio el virtualizar y reducir los diferentes componentes que tiene los gabinetes, es por esto que una UPS de tamaño compacto será el aliado ideal en este proceso de optimización de espacio, ya que se adecuará a las soluciones necesarias para la correcta reducción de espacios y con diseños que permiten un fácil mantenimiento.
Factor de potencia: Cada componente del centro de datos está actualmente diseñándose para ser más eficientes, por lo que los UPS no deberían ser la excepción. Al momento de decidir la opción correcta, elegir un UPS que sean factor de potencia 1, con eficiencias superiores al 93 por ciento y que tengan opciones de uso “ECO”, se podrá disminuir el impacto ambiental del centro de datos.
Estos son algunos de los pasos clave para poder desarrollar una implementación funcional para un centro de datos que busque alcanzar la eficiencia energética.
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