Celebra el Presidente de Estados Unidos, 100 mil nuevos empleos y una inversión de casi medio billón de dólares en energía limpia

En su discurso sobre el Estado de la Unión, el presidente Joe Biden celebró el progreso de Estados Unidos hacia un futuro energético descarbonizado. Ahora que se está implementando la Ley de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés), que contiene 369 mil millones de dólares en gastos en materia de clima y energéticos, el enfoque ahora se centra en el despliegue y el crecimiento a medida que la energía fotovoltaica ocupa un lugar central en la transición energética.

Desde que se aprobó la IRA, se han creado más de 100 mil empleos en el campo de la transición energética, muchos de los cuales son empleos de fabricación en almacenamiento de energía solar y de baterías. Ya se han anunciado más de 60 mil millones de dólares en inversiones privadas desde que la ley entró en vigencia en agosto.

Jason Grumet, director ejecutivo de American Clean Power Association: “Durante los próximos años, estas y futuras inversiones generarán casi un millón de empleos estadounidenses y fortalecerán nuestra cadena de suministro nacional al tiempo que reducen nuestra dependencia de la energía extranjera.”

El desempleo en los Estados Unidos es ahora el más bajo en más de 50 años, lo que marca un repunte después de la pérdida de empleos causada por la pandemia de COVID-19. Actualmente se sitúa en sólo el 3,4 por ciento. Desde que Biden asumió el cargo, se han creado más de 800 mil puestos de trabajo en el sector manufacturero.

“¿Dónde está escrito que Estados Unidos no puede volver a liderar el mundo en manufactura? Durante décadas, importamos productos y exportamos empleos”, dijo el presidente Biden, y añade: “Ahora, gracias a todo lo que hemos hecho, estamos exportando productos estadounidenses y creando empleos estadounidenses. La inflación ha sido un problema mundial debido a la pandemia que interrumpió las cadenas de suministro y la guerra de Putin (Presidente de Rusia) que interrumpió el suministro de energía y alimentos. Pero estamos mejor posicionados que cualquier otro país de la Tierra. Tenemos más que hacer, pero aquí en casa, la inflación está bajando”.

Se espera que los gastos anuales de energía de Estados Unidos disminuyan en al menos un cuatro por ciento para 2030 según la ley, un ahorro de casi 50 mil millones de dólares por año para los hogares, las empresas y la industria.

“Para 2032, habrá cinco veces la cantidad de energía solar instalada que hoy, que es suficiente electricidad para alimentar todos los hogares al este del río Mississippi. Las personas en todos los códigos postales respirarán aire más limpio y trabajarán en carreras de energía limpia estables y que respalden a la familia”, dijo Abigail Ross Hopper, directora ejecutiva de la Asociación de Industrias en Energía Solar (SEIA).

El presidente Biden continuó celebrando el plan para instalar 500 mil estaciones de carga de vehículos eléctricos en todo el país por parte de decenas de miles de la Hermandad Internacional de Trabajadores Eléctricos. Señaló el hecho de que los estadounidenses pueden ahorrar más de mil dólares al año con créditos fiscales para la compra de vehículos eléctricos y electrodomésticos de bajo consumo. Durante su presidencia se han anunciado más de 20 mil proyectos de infraestructura, realizando actualizaciones en aeropuertos, puentes, líneas de transmisión y más.

Gregory Wetstone, presidente y director ejecutivo de la Consejo Americano de Energía Renovable (ACORE por sus siglas en inglés): “El crecimiento renovable empoderado por el IRA solo ocurrirá si mejoramos y ampliamos la red de transmisión eléctrica de la nación, que es ineficiente, balcanizada y anticuada en gran parte del país. Necesitamos una red del siglo XXI que sea más capaz de soportar eventos climáticos severos cada vez más frecuentes y que pueda mover eficientemente la energía de las áreas de recursos renovables más ricas de Estados Unidos a los centros de población con la mayor demanda de electricidad.”

Un informe de la Universidad de Princeton menciona que la Ley de Reducción de la Inflación podría reducir las emisiones anuales en el 2030, en mil millones de toneladas métricas adicionales. Esto representaría cerrar dos tercios de la brecha de emisiones restante entre la política actual y el objetivo nacional para 2030 de reducir las emisiones un 50 por ciento por debajo de los niveles de 2005.

“Realmente me hace increíblemente optimista”, dijo Jesse Jenkins de Princeton y añade: “No nos lleva hasta allí por sí solo, pero nos mantiene en la lucha climática.”

Según el IRA, el despliegue solar puede acelerarse desde las tasas de 2020 de 10 GW de capacidad agregada por año a casi cinco veces más para 2024, agregando 49 GW de energía solar generada a gran escala cada año. El despliegue solar puede superar los 100 GW por año para 2030, señaló Princeton.

La inversión en energía solar podría alcanzar los 321 mil millones de dólares en 2030, casi el doble de la cifra de 177 mil millones de dólares prevista en el panorama de políticas anterior. La Ley puede conducir a casi 3,5 billones de dólares en inversión de capital acumulada en el nuevo suministro de energía estadounidense durante la próxima década, menciona el estudio de Princeton.